Para que el alumnado se motive, se divierta y sienta la necesidad y utilidad de aprender es necesario que sepa qué va a aprender, cómo lo va aprender y para qué le va a servir. Se organiza en tres subapartados:
¿Qué vamos a aprender?
¿Cómo lo vamos a aprender?
¿Qué y cómo se va a evaluar?